Dorian cogió el cuerpo de Fred y el colgante de la señora y
se marcho rápidamente de la casa. Dorian tenía que encubrir el cadáver de su
amigo. Cogió una balsa y se fue al lago, paro a mitad. Tiro el cadáver de Fred
al lago. Dorian volvió nadando a la orilla. Al día siguiente se encontró el
cuerpo de Fred en el Lago. El funeral fue ese día. También se descubrió el
cadáver de la señora. Como no tenía familia, la casa se subastó en el pueblo. La
casa no se vendió. Parece ser que a nadie le gusta una casa donde se ha
suicidado una señora.
Dorian estaba confuso, ya no sabía por dónde investigar.
Tenía la llave y el colgante, pero no servían para nada si no sabía cómo ni
donde usarlos. Tendría que volver a mirar en la casa de la señora para
investigar a fondo.
Al día siguiente, Dorian se fue a un bar del pueblo a
desayunar. A la gente no parecía alterarle las últimas muertes. Dorian se quedo
pensativo, no entendía cual era el fin del asesino. Mientras pensaba la
camarera se fijo en el colgante que Dorian le había quitado a la señora. Le
pregunto de donde lo había sacado. Dorian dijo que fue un regalo. La camarera
le dijo que en el pueblo había un anticuario donde podían decirle su origen. Dorian
intrigado fue corriendo al anticuario que le había dicho la camarera.
El anticuario estaba cerca de un bosquecillo. Era una casa
pequeña, antigua. Había un letrero en la puerta. El letrero decía que la tienda
estaba cerrada. Dorian antes de irse, abrió la puerta. No necesito nada para
forzarla porque la puerta no estaba cerrada. Dorian entró en el anticuario. En
la sala había muchas estanterías llenas de objetos antiguos, tenían mucho
polvo. Dorian cruzó la habitación. Estaba en el medio de la sala. Cuando vio
que allí no había nadie se dispuso a salir. Pero había un problema, la puerta
no se abría, estaba cerrada con llave. No sabía qué hacer, así que, intento
huir por una ventana, cuando un hombre le tapo la cara con un trapo lleno de
cloroformo. Dorian se desmayo.
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